Sistema numérico
Los antiguos mayas descubrieron dos ideas fundamentales en matemáticas: el valor posicional y el cero. Sólo otra gran cultura de la antigüedad llegó a encontrar, cerca de 300 años después que los mayas, estos conceptos: la cultura hindú.
Estos dos elementos, el valor posicional y el cero, pudieran parecernos simples y básicos hoy en día. De hecho, lo son, y en ello radica precisamente su genialidad. Griegos y romanos, con toda la fuerza de su espíritu y de sus instituciones, no lograron descubrir estos principios. Basta tratar de escribir un número suficientemente grande en notación romana para darnos cuenta de la importancia del cero y del valor posicional.
El sistema maya es vigesimal, no decimal como el nuestro. Esto significa que, en lugar de contar con diez dígitos, del cero al nueve, los mayas contaban desde el cero hasta el diecinueve antes de empezar de nuevo en el siguiente orden. Esto tal vez se deba a que usaban dedos de manos y pies para llevar la cuenta.
En el sistema decimal, el valor posicional se encuentra en cuanto pasamos del nueve. Esto es, un uno seguido de un cero es un diez. En el sistema maya, un uno seguido de un cero es igual a veinte.
Nuestro sistema numérico emplea diez símbolos para representar cada uno de los dígitos. Los numerales mayas se escriben con sólo tres símbolos: un punto, que significa uno; una raya, que es un cinco, y el glifo de un caracol para representar el cero.
De esta manera:
Y los primeros veinte numerales serían,
El calendario
Otro de los milagros producidos por la cultura maya fue el calendario de la cuenta larga, sistema más preciso que el calendario gregoriano, que es el que usamos hoy en día. Una comparación sencilla ilustra el grado de perfección a que llevaron los mayas sus medidas del tiempo:
Duración del año según
la astronomía moderna:
Según el antiguo año juliano sin corregir:
Según nuestro año actual gregoriano corregido:
Según los antiguos mayas:
la astronomía moderna:
Según el antiguo año juliano sin corregir:
Según nuestro año actual gregoriano corregido:
Según los antiguos mayas:
365.2422 días.
365.2500
365.2425
365.2420
La unidad del calendario maya es el día o kin. Al segundo orden de 20 días se le llamó uinal. En un sistema perfecto de numeración vigesimal, el tercer orden debería contener 400 días (20 x 20 x 1), pero al llegar a este punto los sacerdotes mayas introdujeron una variante para cómputos calendáricos. El tercer orden, el tun, tenía 18 uinales, esto es, 360 kines. Esto se aproximaba más a la duración del año solar.
Después del tercer orden, la progresión es uniforme:
20 kines = 1 uinal = 20 días.
18 uinales = 1 tun = 360 días.
20 tunes = 1 katún = 7,200 días.
20 katunes = 1 baktún = 144,000 días.
18 uinales = 1 tun = 360 días.
20 tunes = 1 katún = 7,200 días.
20 katunes = 1 baktún = 144,000 días.
Todas las fechas de la cuenta larga contenían cinco numerales, esto es, el número de baktunes, katunes, tunes, uinales y kines transcurridos desde el "inicio del tiempo", según el sistema maya.
Se ha llegado a establecer por diferentes medios y correlaciones que el año cero del sistema calendárico maya corresponde al 3113 antes de Cristo, con lo cual tenemos todos los elementos necesarios para calcular y corresponder cualquier fecha de la cuenta larga con nuestro propio sistema calendárico.
El calendario maya es cíclico, porque se repite cada 52 años mayas. En la cuenta larga, el tiempo de cómputo comenzó el día 0.0.0.0.0 4 ahau, u 8 cumkú (en notación maya) que equivale al 13 de agosto del 3114 a. C. en el calendario gregoriano] y terminará el 21 de diciembre de 2012.